¿Habéis empezado ya con las compras de Navidad?.
Yo todos los años me propongo hacerlo con tiempo, para evitar así la locura de los últimos días, donde ves a gente que compra por comprar, porque ni tiene tiempo ni tiene surtido suficiente para elegir porque está casi todo arrasado. En parte la escena es graciosa, si la observas desde lejos, claro, pero si te encuentras inmersa en ella, es de lo más agobiante y desesperante, y más cuando buscas algo muy concreto.
Todavía recuerdo el tiempo que perdí y los viajes de un lado para otro que tuve que hacer el año pasado en busca de unas cuantas cosas de los Bakugan que mis sobrinos habían pedido en su carta. Por aquel entonces yo ni siquiera conocía a los dichosos Bakugan, pero os aseguro que a partir de entonces los conozco muy, pero que muy bien. ¡Madre mía!. Parecía la protagonista de la película "Un padre en apuros", ¿os acordais, con Arnold Schwarzengger?.
Ayer estuve en una tienda de juguetes y ya se palpaba ese nerviosismo previo a la Navidad, y observaba cómo la gente iba cargada hasta los topes con los regalos, imagino que para que no les pase lo mismo que a mí el año pasado.
Os quiero contar algo que pasó en esa tienda: en la zona de la salida había unos rollos con papel de regalo y unas mesas para que cada uno envolviese sus juguetes, y no os podéis imaginar la escena que presenciamos varias personas que por allí pasamos. Una chica, que encima no llevaba compra alguna, comenzó a enrollar papel, y a enrollar, y a enrollar..., bueno, de verdad que se me caía la cara de la vergüenza ajena que me estaba dando. No sé los metros que enrolló, pero poco papel dejó para los que esperaban, os lo aseguro.
Creo que así no son las cosas. Luego nos quejamos de que no nos den facilidades ni ningún servicio extra, adicional a lo que pagamos, cuando resulta que nos comportamos de una manera completamente incivilizada.
Bueno, y ya que estamos hablando de compras navideñas, recordaros el consejo de ir adelantando los pedidos, que luego el tiempo pasa volando y nos encontramos en la víspera de Reyes o de Papá Noel con las manos vacías por no poder llegar a tiempo.
Aquí tenéis unas bolsitas de guardería y merienda de colores pastel (ideales para combatir una tarde tan gris como esta). Serán un regalo más bajo el árbol de dos niñas estas Navidades. Quienes me las encargaron, igual que quienes solicitaron todas las demás que os muestro preparadas para ser enviadas, prefirieron seguir mi consejo y no sentirse "en apuros"...
(Que comencéis bien la semana. BSS.).
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2 comentarios:
Hola !!! Me encanta tu blog. Las cositas que he visto, estan hechas muy pero que muy finas. Los cuadritos sobre todo me llaman mucho la atención.
Felicidades por tus trabajos.
Un saludito
Marisa.
P.D. He llegado a tu blog a traves de mi hijo, que alumno tuyo.
Ah, que se me olvidaba, te invito a pasar por mi blog.
http://curuxiamini.blogspot.com/
todo precioso también los paquetitos.clara.
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